Una caña sin espuma.

Autor: Miguel Soriano

La caña (Arundo donax) es una especie de la familia de las gramíneas, como el trigo o el maíz. Es una planta que invade zonas con suelos húmedos, creciendo rápidamente y su gran expansión es favorecida por sus tallos subterráneos. 

Tradicionalmente se ha empleado en la agricultura, para fabricación de pequeñas estructuras, vallas e incluso muebles. Pero el abandono que ha sufrido el campo y las riberas de los torrentes, junto con la falta de uso ha producido una expansión que ha desplazado a otras plantas propias de la vegetación de nuestras riberas o bien ha aprovechado zonas que antiguamente se cultivaban. Especies como el baladre (Nerium oleander), tamarell (Tamarix sp.), chopos (Populus sp.), olmos (Ulmus sp.) son las que deberían cubrir las riberas de nuestros torrentes junto con otras especies de arbustos como la murta (Mytus communis). Es singular que en algunos torrentes de Ibiza las orillas de los torrentes las ocupe el pino piñonero o pi ver (Pinus pinea).

Dentro de los problemas que genera la presencia de caña no solo está el desplazar otras especies sino también la gran cantidad de biomasa que se acumula a lo largo de los años, genera riesgo de obstrucción en puentes, cuando hay precipitaciones intensas y en caso de incendiarse genera fuegos de gran intensidad y complejidad en su extinción.

Los tratamientos para su erradicación son costosos y si no van acompañados de un mantenimiento ineficaces. Pero la caña tiene también su talón de Aquiles, y no le gusta que haya otras especies que le hagan sombra, así que donde crecen otras especies la caña tiene poca fuerza o no está presente.

Si tienes un terreno junto a un torrente y se ha llenado de caña, su eliminación puede suponer un beneficio, siempre que se haga con las debidas condiciones. El pastoreo posterior a su corta, o la implantación de especies que a la larga formen un bosque sombrío pueden ayudar a que el rebrote sea menor. 

Desde la Conselleria de Medi Ambient i Territori, te recordamos que si tienes una edificación rodeada de vegetación que puede propagar un incendio has de tomar las medidas de autoprotección suficientes como para que no se vea afectada tu edificación.

Nunca quemes las cañas, en Baleares hemos sufridos incendios muy peligrosos por quemas negligentes de cañas puesto que es muy fácil que se descontrole el fuego y puedes sufrir daños tú mismo, tu terreno y los de los vecinos.

Otras especies de cañas que se emplean en jardinería también pueden convertirse en invasoras, si no es necesario es mejor que no las emplees.